Reconocemos que somos grandes amantes del cine, las series, y obviamente la música; pero cuando todo esto se une, y además, con toda la esencia que defendemos en Música para Despertar, la emoción que nos invade es inmensa. Quizás aún no habéis visto la temporada 4 de Stranger Things, y no queremos destriparos demasiado, pero resulta que se introducen los personajes en un antiguo centro psiquiátrico, buscando posibles respuestas, y encuentran que los profesionales del centro experimentan el «puente» que consigue la Banda Sonora de las personas que atienden, con dificultades cognitivas, permitiendo otra comunicación, otros aspectos cognitivos, emocionales… AVISO DE SPOILER! (Esperemos no nos odiéis, pero es necesario seguir concienciando a más personas acerca de los beneficios de la música en personas con demencia y otras alteraciones cerebrales).
Dando la clave a los protagonistas, para poder librar a una de ellas a entrar en el «lado oscuro», descubriendo su canción favorita, corriendo a buscarla entre sus cintas de cassette, y colocando unos auriculares conectados a su walkman, siendo la música la que claramente conecta con recuerdos dentro de las tinieblas, permitiendo ese sentimiento de «despertar» del que tanto hablamos.
Cuando el villano intenta cobrar su vida, los compañeros usan su canción preferida para tender un puente entre los mundos, abrir una puerta y que su alma pueda escapar del bajo mundo. En su caso, utilizaron el tema de los 80 “Running Up That Hill” de Kate Bush, y que tras la trama han viralizado convirtiendo en unas de las canciones más escuchadas del mundo actualmente.
Para nosotros, ese villano puede ser el Alzheimer, que no parará su progresión para ir acabando con mucho de lo que ha sido una persona en su vida, pero hay algo que se mantiene hasta el final, la capacidad de sentir emociones, así como la memoria musical, creando entre emociones y melodías un puente con recuerdos de toda una vida. Siendo las melodías de la Banda Sonora de una persona, la que nos permite que surja otra comunicación, otras emociones y recuerdos, así como ayudando en la gestión de comportamientos complicados que suelen acompañar a las demencias más avanzadas.
Cada vez vemos más referencias mundiales, cada vez lo tenemos más claro: La música es la herramienta, y el amor es el camino; no sólo el camino y la dirección de nuestra atención y cuidados, desde el amor, el respeto, la paciencia, la conciencia plena… sino también es una muestra de amor por una persona, el deseo de introducirnos en su Historia de Vida, para descubrir y rescatar su Banda Sonora, ya que esas canciones y melodías serán clave en su día a día, en la mejora de su bienestar, y acompañarán hasta los últimos suspiros, facilitando el tránsito de esta vida, y culminando de la mejor manera posible cada Historia.